Los bioestimulantes agrícolas, de acuerdo con el Reglamento 2019/1009 de la Unión Europea, los bioestimulantes se definen como:
Productos fertilizantes cuya función consiste en estimular los procesos de nutrición de las plantas con independencia del contenido de nutrientes del producto, con el único objetivo de mejorar una o varias de las siguientes características de las plantas y su rizosfera:
- eficiencia en el uso de los nutrientes,
- tolerancia al estrés abiótico,
- características de calidad, o
- disponibilidad de nutrientes inmovilizados en el suelo y la rizosfera.
En México la normatividad en cuanto a bioestimulantes es nula. En 2020 existió un Proyecto de Modificación a la Norma Oficial Mexicana NOM-077-FITO-2000, Por la que se establecen los requisitos y especificaciones para la realización de estudios de efectividad biológica de los insumos de nutrición vegetal, que en su numeral 3.1.5 menciona que “[…] tiene un efecto bioestimulante al mejorar la eficiencia nutricional, la tolerancia al estrés abiótico y/o la calidad del cultivo”.
En general, los bioestimulantes son formulados basados en materias primas de origen orgánico con una concentración variable de nutrientes, que ofrecen mejorar las características de las plantas y su producción o el manejo de algún tipo de estrés.
Las fuentes de bioestimulantes pueden ser de dos tipos: microbianos y no microbianos:
- Microbianos:
- Fijadoras de Nitrógeno, Solubilizadores de Fósforo, Productoras de Fitohormonas: Azospirillum, Azotobacter, Rhizobium, Bacillus, Paenibacillus, Pseudomonas, Rhizophagus, etc.
- Microalgas y Cianobacterias.
- No Microbianos:
- Macroalgas Marinas: Macrocystis, Laminaria y Ascophillum.
- Extractos vegetales: Con contenido de Fitohormonas y M.O.
- Hidrolizados de animales y plantas (Aminoácidos).
- Ácidos Húmicos y Fúlvicos (Carboxílicos).
- Vitaminas.
Dentro del grupo de Bioestimulantes Microbianos se encuentran bacterias benéficas que son capaces de producir sustancias biológicamente activas, como algunas fitohormonas, ácidos orgánicos y otros metabolitos capaces de mejorar la absorción de nutrientes en el suelo y en el caso de las productoras de fitohormonas, es posible la estimulación del desarrollo de raíces.
Los tipos de bacterias bioestimulantes que pueden colonizar la rizósfera se agrupan de acuerdo con la siguiente clasificación:
BCA: Agentes de Control Biológico o Biocontroladores,
PGPR: Rizobacterias promotoras del crecimiento vegetal,
PGPB: Bacterias promotoras del crecimiento vegetal.
AMFB: Bacterias del suelo asociadas a los hongos formadores de micorrizas arbusculares.
Proroot Raizorg es una formulación a base de bacterias benéficas como Paenibacillus taichungensis y Bacillus subtillis. En un producto con función bioestimulante que activa de forma natural el desarrollo de las raíces y la protección contra bacterias patógenas.
Proroot Raizorg es un bioestimulante microbiano, diseñado para inducir y estimular el desarrollo óptimo de las raíces, promoviendo principalmente la formación de raíces secundarias. Posee una formulación a base de un consorcio de bacterias, que son capaces de fijar Nitrógeno (N) atmosférico y solubilizar Fósforo (P), de modo que en interacción con las raíces ejerce efectos nutritivos positivos y estimula el crecimiento vegetal.
Proroot Raizorg se aplica vía suelo y a través del sustrato o sistema de riego, en cualquier época del año y durante las etapas del desarrollo de la planta.
Modo de Acción:
Las bacterias de Proroot Raizorg pertenecen al grupo de bacterias PGPB (bacterias promotoras del crecimiento vegetal, por sus siglas en inglés) que después de aplicadas a las raíces, se instalan en la rizósfera; ahí absorberán los exudados de la planta ricos en Aminoácidos y en su interior lo transformarán en auxinas bioactivas (Ácido Indolacético) que estimulan el enraizamiento.