Todos los cultivos, ya sea de siembra directa o de trasplante, requieren ciertas condiciones específicas para lograr éxito en las primeras etapas de su ciclo y por consiguiente tener un desarrollo y producción optima; a manera de check list o lista de requerimientos, podemos mencionar:
- Buen Aporte Nutricional: principalmente Nitrógeno y Fósforo.
- Bioestimulación adecuada: para lograr una correcta división celular y desarrollo de raíces, tallos y hojas.
- Protección fitosanitaria contra ataques de insectos y ácaros plaga y enfermedades.
- Riego necesario, para evita estrés hídrico y asegurar la nutrición.
- Suelo debidamente preparado.
- Una plántula apta para trasplante (o semilla para siembra directa).
- Estimula el crecimiento radicular por lo que existe mayor capacidad de asimilación de nutrientes y agua.
- Promueve el aumento en la longitud de tallos.
- Integra diferentes rutas de inducción (minerales, ácidos orgánicos, aminoácidos).
- Ayuda a superar el estrés por trasplante.
- Ayuda a la generación de raíces.
- Complementa la nutrición de la planta.
Una vez teniendo los elementos anteriores, es más seguro tener éxito en la siembra o trasplante del cultivo.
Los Starters en la primera etapa del cultivo.
En general, se conocen como Starters a los fertilizantes que aportan cierta concentración de nutrientes altamente necesarios para la primera etapa de desarrollo de la planta: en su fase inicial de desarrollo de raíces, tallo y hojas verdaderas.
En esta etapa, se requieren altas cantidades de Fósforo y Nitrógeno (en comparación con otras etapas) y la forma de suministrarlo a la planta, es vital para lograr la correcta nutrición. Aunado a esto, es muy importante iniciar con la estimulación de la división celular primeramente en el sistema radicular y posteriormente en tallos y toda la estructura foliar.
En Fagro diseñamos un paquete Proroot (Con nutrición y bioestimulación), para la primera etapa de los cultivos. Su formulación se basa en una mezcla balanceada de hormonas Enraizadores macronutrientes y ácidos fúlvicos, los cuales son de fácil absorción y asimilación tanto foliar o radical. Las auxinas (ANA y AIB) son principales hormonas exógenas que ejercen el control primario en la formación de raíces y actúan conjuntamente con cofactores de enraizamiento como fosforo y ácido fúlvico para promover el desarrollo de un mayor número de raíces de excelente vigor, incrementar el prendimiento de plántulas en almácigos o en campo y restablecer en corto tiempo el sistema radicular en cultivos de trasplante.